Durante la Segunda Guerra Mundial, cuando estaba nevando fuertemente, el coche del general Eisenhower estaba en camino de regreso al cuartel general, listo para una reunión militar de emergencia.

De repente, a través de la ventana, el general vio a una vieja pareja francesa sentada a un lado de la carretera, temblando ante el frío viento. Ordenó una parada y preguntó por la situación.

Resultó que la pareja de ancianos fue a París a correr por su hijo, porque el coche se descompuso en el medio, tuvo que esperar en la nieve, a la espera de rescate. En un día nevado, pocas personas pasan por aquí.

El personal de pares le dijo al general: "Tenemos que llegar a la sede a tiempo para la reunión, el tiempo se está acabando, este tipo de cosas o dejarlo en la policía local". "

"¡Si la policía hubiera acudido al rescate, habría temido que la vieja pareja se hubiera congelado hasta la muerte aquí!", dijo el general.

El general inmediatamente pidió a la pareja de ancianos que se subió a su coche y los llevó a la casa de su hijo en París antes de apresurarse a regresar a la sede. Las buenas acciones del general le permitieron escapar.

Algunas personas piensan que fue la suerte del general Eisenhower. De hecho, no hay coincidencia en la vida, el destino está dominado por el corazón, salvar a los demás es salvarse a sí mismos, es el buen pensamiento del general para salvarse a sí mismo.

Texto Taoísta